Bienvenidos

Bienvenidos a mi blog, este es un espacio dedicado a publicar textos fundamentalmente epistemológicos, tratando ser una aproximación amable sobre un tema complejo en el que abundan las retoricas absurdamente crípitcas y barrocas para el entendimiento común de la población general.

viernes, 31 de diciembre de 2010

Actualidad: Física, Recreando el Big Bang

Según la teoría de la relatividad de Einstein, la ecuación E=mc2, describe cómo la materia puede convertirse en energía y vice versa. Eso quiere decir que mientras más masa está involucrada en un choque, más energía es liberada. Tal como se cree que ocurrió el Big Bang: miles de choques simultáneos liberaron la energía que creó todo el Universo.

La recreación -a pequeña escala- de esos choques ocurridos microsegundos antes de que el Universo comenzara a existir es lo que logró un grupo de científicos del Gan Colisionador de Hadrones, máquina que funciona en el interior de un túnel circular de 27 km de largo, bajo la frontera franco-suiza.

En marzo pasado, los mismos científicos recrearon un mini Big Bang haciendo chocar protones de hidrógenos. Ahora, sin embargo, lo hicieron con iones de núcleo de plomo, que tienen hasta 200 veces más masa que los protones, lo que significa que en el choque se liberó 100 veces más energía, según explica a La Tercera el físico de la U. Santa María, Claudio Dib.

El experto dice que al liberarse tal cantidad de energía se producen una especie de fogonazo similar al que ocurrió en el Big Bang, lo que sirve para aprender sobre el plasma del que el Universo estaba compuesto una millonésima de segundo después del Big Bang, hace 13,7 millones de años.

Para realizar el experimento, los físicos usaron un acelerador experimental -llamado Alice- que fue específicamente diseñado para hacer impactar los iones de plomo. El choque logró obtener las temperaturas y densidades más altas jamás producidas en un experimento, según explica a BBC, David Evans de la Universidad de Brimingham, uno de los investigadores que trabaja con Alice. "Este proceso tuvo lugar en un lugar seguro, un medio ambiente controlado, generando mucho calor y densas bolas de fuego subatómicas con temperaturas sobre los 10 billones de grados, un millón más calientes que el que se experimenta en el núcleo del Sol", dijo.

Desde el punto de vista científico, explica Dib, el experimento permite entender cómo interactúa la materia a un nivel muy pequeño y a muy altas temperaturas. Un tema no menor, ya que a ese nivel de temperatura los protones y neutrones que forman el núcleo del átomo se derritan generando una densa sopa caliente de quarks y gluons, que son las partículas subatómicas bases de la materia.

Evans dice que al estudiar ese plasma, los físicos también buscan entender más sobre la llamada "Gran Fuerza", es decir, aquella que uno a los átomos del núcleo y que es responsable del 98% de su masa.

Quezada, T. (2010, noviembre 9) Gran Colisionador de Hadrones logra recrear mini Big Bang con iones. La Tercera, p. 34.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Crítica de la clasificación internacional en psiquiatría

Tenemos clasificación, una y única, donde todo cabe. Hasta lo que en ella no entra. ¿Clasificación de qué? De los “trastornos mentales”. Prudente título. Es el único capítulo de la clasificación internacional de enfermedades de la Organización Mundial de la Salud (OMS) donde no se habla de que sean enfermedades las clasificadas. Son “trastornos” troublés, disorders. Pero aquellos a quines la clasificación se aplica no son, sin embargo, “trastornados” troublés, disorders. Son “pacientes” o “enfermos”.

¿Enfermedades o trastornos? Hay allí de unas y de otros. Desde la demencia senil hasta el “desajuste conyugal”. Difícil es descubrir que tienen de común. El sustantivo es ambiguo y múltiple.

“Mentales”. Ya William James había definido a la psicología como ciencia de la vida mental. Mas no dejó definición de la mente. Y hoy, reconoce George Millar, que adhiere a esa definición. Sabemos que “mente” es algo distinto de lo que James creía que era, pero tampoco podemos definirla. El concepto es inasible. Funciona, sin embargo, porque pertenece al lenguaje vulgar y desde allí es que se pasa al campo médico. Pertenece definitivamente al arsenal de las nociones ideológicas, terreno donde el fenómeno es reconocido. Y desconocido.

La medicina clasificatoria es la del siglo XVIII, la que precede al método anatomo-clínico. Su pretensión es la de aislar a las enfermedades como especies naturales e incluirlas en un espacio clasificatorio homogéneo. Su modelo es la clasificación de las especies vegetales efectuado por Lineo. Su método es la descripción de los fenómenos tal como ellos se aparecen a los órganos de los sentidos, muy particularmente de la vista. La enfermedad es considerada como una entidad perfecta, cerrada en sí misma, que se da plenamente en el medio natural de la vida familiar, especialmente entre los pobres y en ambientes rurales. El hospital, la ciudad, las características personales, los refinamientos sociales son otros tantos elementos de perturbación que afectan a la manifestación de su íntima naturaleza. El lugar de la enfermedad es la clasificación. Allí se relaciona con otras enfermedades sobre la base de analogías formales. El cuerpo es el sitio donde la enfermedad se manifiesta. El enfermo enturbia la limpidez del cuadro. Es necesario hacer abstracción de él para poder reconocer la enfermedad. La mirada del médico atraviesa el cuerpo del paciente para posarse en la taxonomía. Dejando la medicina clasificatoria se pasó del síntoma a la lesión y de la lesión a la etiopatogenia constituir la medicina de nuestro tiempo. Otra característica de la medicina clasificatoria es su desconfianza o su escepticismo ante toda pregunta por las causas de lo observado. Produce de modo “lógico”: observa, describe, designa, calcifica.

El siglo XIX es el momento en que los locos pasan a ser patrimonio y problema de la medicina. Aparece el hospital psiquiátrico y se confía a los médicos la investigación y la definición de las formas de la locura. En el territorio del hospicio y en el marco ideológico de la medicina clasificadora se produce la distinción de melancolía, manía con delirio, manía sin delirio, demencia e idiotismo, hecha por pinel, y que está en la base de todas las clasificaciones ulteriores.

La sistematización de Kraepelín, organizadora de la psiquiatría del siglo XX, incluye entre sus 14 categorías a las psicopatías y a las reacciones psicógenas. Es habitual decir que Kreapelin es el Linneo del la psiquiatría. Tal vez resida ahí la dificultad. La taxonomía botánica ha sido el modelo inspirador. Se trató de describir sobre la base de las apariencias, pro olvidando que las especies botánicas tienen un carácter perceptual. La mirada Krapeliana es una mirada que objetiva, que describe y que introduce a la enfermedad dentro de una jerarquía de categorías, subcategorías y variedad equivalente a la jerarquía de clase, género y especie. La descripción del botánico traspone los caracteres formales de la cosa. La confiabilidad del sistema se acerca al absoluto y por eso sirvió de modelo para todo tipo de clasificaciones de objetos visibles. ¿De dónde podría Kreapelin extraer los caracteres que le permitiesen pasar del individuo a la especie en el marco de la clasificación psiquiátrica? Nada podía darle la vista. Era menester algún aparato emocional, allí estaba la psicología, de la psicología de laboratorio, empeñada en distinguir y estudiar las funciones elementales del alma, la psicología de Wundt. A ella se dirigieron los psiquiatras alemanes y de ella se deriva la actual semiología psiquiátrica que tiende a ubicar a cada individuo dentro de la especia mórbida que le pertenece.

En la psiquiatría no hay conocimiento de las causas. Solo descripciones y alusiones a las características constitucionales e influencias hereditarias cuando no se trata de encafalopatías. El espectro que atormenta a la psiquiatría alemena es el de las llamadas psicosis endógenas y la tentación que estas ofrecen al pensamiento especulativo y a las interpretaciones metafísicas. La preocupación esencial de la psiquiatría procedente de la nosografía alemana es la de mantenerse como especialidad de la medicina, dentro de una concepción científico-natural entendiendo que sólo en el cuerpo puede encontrarse la base de una ciencia materialista.

El eterno drama de la psiquiatría krapeliniana consiste en que a diferencia del resto de la medicina, carece de un espacio corporal en el cual plantar sus especies creadas según el modelo botánico. Es por eso que la sección de los trastornos mentales, de Clasificación Internacional de las Enfermedades, los criterios diagnósticos son casi puramente sintomáticas. A falta de suelo lesional, suelo nocional. A falta de espacio corporal, espacio taxonómico. A falta de explicación, clasificación. A falta de residencia, parentesco de las enfermedades.

La psiquiatría contemporánea es una actividad de reconocimiento de correlaciones entre fenómenos llamados síntomas. Las “enfermedades mentales” sólo existen en el espacio clasificatorio y, desde él, irradian hacia los sujetos-soportes y agentes de la psiquiatría y hacia los referentes llamados pacientes, que habrán de incluirse en tal espacio.

Clasificar es reconocer y designar una diferencia. Una especie animal o vegetal se define por aquello que no son las otras especies. La racionalidad de la clasificación depende de la existencia de un carácter que sea común a todas las especies incluidas y, a la vez, que presente diferencias para justificar la separación. Este carácter común y desigual es el eje de la clasificación, el instaurador del espacio donde las especies se despliegan. Al comenzar dijimos que el adjetivo “mental”, carente de significación conceptual, no podía creer en torno de él sino un espacio ilusorio. Hay que preguntar ahora por la naturaleza de las especies incluidas en la clasificación para descubrir ese eje de continuidades que da homogeneidad a la clasificación.

La sucesión de los números naturales (en la clasificación) crea la ilusión de una serie, de un continuo, donde se distribuirían objetos homogéneos. Pareciera entonces que hay continuidad entre los referentes y que hay un eje que pude ligar, digamos, a la psicosis alcohólica, la neurosis histérica, la personalidad paranoide, el fetichismo, los trastornos físicos de origen presumiblemente psíquico, los trastornos de conducta de la infancia y el desajuste social sin trastorno psiquiátrico manifiesto. Lo que se oculta es la ruptura de esa continuidad, el quiebre permanente de la mismo por los cambios de problemática. Pasando de un número a otro se pasa del terreno de la biología al del psicoanálisis, de éste a lo jurídico-penal, de allí a lo sociopolítico. Insensiblemente. Se produce así un efecto ideológico de borramiento de las diferencias que pasa desapercibido, que es inconciente, tanto en el diagnosticador como en el diagnosticado. El psiquiatra es un médico y es la institución, la corporación, el aparato ideológico de la medicina el que se hace cargo del problema.

También en la ordenación se juega un efecto ideológico. Se comienza por las psicosis asociadas con síndromes orgánicos cerebrales. La pertinencia y la jurisdicción médicas son en este caso indiscutibles no sólo para el tratamiento sino también para la explicación del proceso. Son encefalopatías que se diagnostican como cualquier otra enfermedad según parámetros clínicos dotados de una correlación anátomo y fisiopatológicas claros y el criterio de la clasificación es etiológico. De allí se pasa a las psicosis, que los antiguos llamaban endógenas, que tienen ciertas analogías con las primeras en el cuadro clínico y la evolución, pero no tienen los elementos biológicos positivos que ellas tenían. Y luego de modo progresivo, la lista nos va llevando progresivamente a afecciones determinadas cada vez más por factores derivados por la inclusión del sujeto dentro de las redes simbólicas para terminar en los “desajustes sociales sin trastorno psiquiátrico manifiesto”. Que incluye el desajuste conyugal, el desajuste social, el desajuste ocupacional, la conducta disocial y otros desajustes sociales.

El uso de los números en la clasificación crea la ilusión de una continuidad y de una homogeneidad de lo clasificado. Distrae de la existencia de saltos con garrocha de una problemática a otra.

Se hace evidente la relación que guardan, actualmente más que nunca, la spiquaitría y la política. Nunca antes se expresaba tan claramente que la psiquiatría es una aparato ideológico del estado. Esta ampliación del campo ha conducido a la psiquiatría lejos, en muchos casos, de su suelo natal: la medicina. Es que la psiquiatría no clasifica lo que quiere sino lo que le llega. Que actúa siempre en la respuesta a una demanda provenga ésta del futuro clasificado o del conjunto social.

Será lícito preguntar, pues, cómo se creó esa representación, que es un lugar común en la práctica jurídica institucionalizada, de que hay una relación entre criminalidad y psicopatología, en otras palabras, cómo llegó el psiquiatra a incluirse en asuntos penales.

La psiquiatría, como aparato ideológico del estado recibe a sujetos en función de su diferencia con lo que se considera normal o con lo que se espera de ellos.

Los procesos que se atribuyen a estos sujetos bajo la forma de “diagnosticos” no son objetos naturales que estén ya ahí, esperando que el psiquiatra los encuentre así como se encuentra una lesión o un bacilo. La psiquiatría crea y, a no dudarlo, seguirá creando los objetos sobre los cuales habrá de discurrir.

Referencias

Resumen de las páginas 13-28 del libro Psiquiatría, teoría del sujeto, psicoanálisis de Néstor A. Braunstein.

Los 117 mil excluidos de la región

El dato duro

Según la encuesta Casen 2009, más de 117 mil personas viven bajo la línea de la pobreza en la Región de Los Lagos, es decir, el 14,2% de la población. Esto significa un aumento de 2,4% en la
pobreza de la Región, en relación a 2006, cuando se situaba en un 11,8%.

Cabe recordar que para medir la pobreza, el MIDEPLAN utiliza el método de la Canasta de satisfacción de necesidades básicas. De esta manera en la Casen 2009 están bajo la línea de la pobreza las familias cuyos ingresos no alcancen los $64 mil 134 mensuales per capita (por integrante) en zonas urbanas y los $43 mil 242 per cápita en zonas rurales. Bajo la línea de la indigencia o en extrema pobreza están las familias cuyos ingresos mensuales no superen los $32 mil 67 per cápita en zonas urbanas y los $24 mil 710 en la ruralidad.

La realidad de los excluidos, 3 historias

Cecilia Molina

Son las 10 de la mañana en el Campamento Las Camelias, ubicado en el sector de Mirasol, y la temperatura no supera los 2 grados Celcius. Una tenue neblina comienza a disiparse y los tímidos rayos del sol dejan ver pequeñas “mejoras” cubiertas de latas, plásticos y cartones. Pese a que el barro impide caminar más rápido, algunos pobladores avanzan apresurados a comercializar latas de bebidas, mientras otros refuerzan sus improvisadas techumbres.

En medio de este desolador panorama está la mediagua de Cecilia Molina Maricahuín, de 18 años, más conocida como “La Peque”, por ser la mamá más jovencita entre las 300 familias que habitan el lugar. En una pieza, que no supera los 9 metros cuadrados y que tiene una puerta forrada en cartón, vive junto a su marido José Fernando Pinda, de 19 años, y sus hijos Alex (7meses) y Britany (2años).

“Yo viví en Los Muermos en una casa normal, pero de repente quise venir a vivir con mi papá y ya han pasado más de dos años”, cuenta mientras muda a su bebé que hace poco estuvo hospitalizado con neumonía.

“Tuvimos que arreglar el techo de nylon y lata, porque se gotea por todos lados y entre harto frío y viento. Cuando hay temporales, sentimos que se va a volar, porque este inverno ha sido más crudo”, explica.

El agua la obtiene de una manguera que viene de afuera del campamento y debe trasladarla en baldes. Gracias a un vecino, también tiene luz para ver televisión y hervir agua. Además le permiten ingresar al baño que un vecino implementó.

“Para juntar plata vendo milcaos, empanadas o ropa que me da la gente, porque mi marido no ha podido encontrar pega, así que él me ayuda y sale a vender por las casas. Los milcaos los vendemos a $100 o $150, y hacemos como $4 mil, pero de eso hay que sacar para la leña, aceite, tocino y papas” señala.

Y así como venden ropa en el parque del sector, también compran “incluso a mis hijos los he vestido con pura ropa comprada en el parque a $200, a $100 y a $50”, dice.

Con mucho esfuerzo, logran juntar hasta $40 mil al mes, lo que se suma a los $6 mil 500 que recibe como asignación familiar por cada uno de sus hijos. “Lo principal es darles de comer a los niños y juntar para su leche y los pañales”, cuenta. Por eso agradece el apoyo de las tías de la sala cuna y jardín infantil Pequeña Sonrisa, a donde lleva a sus pequeñitos, de 9 a 16 o 18 horas. “En el jardín comen, por eso los tengo ahí”, expresa.

Para calefaccionarse tienen una pequeña cocina a leña, que encienden con viruta que su marido consigue en una barraca. “Hoy voy a hacer porotos, pero cuando no hay nada, mi marido trata de salir a vender algo”, afirma.

Bajo estas condiciones, Cecilia y su familia registraban 2 mil y tantos puntos en su Ficha de Protección Social, “pero a hora se me subió a más de 4 mil (a mayor puntaje, menos ayuda), aunque vivo en las mismas condiciones o peor”

Pese a esta lucha diaria para satisfacer las necesidades de su hijo, “La Peque”, no pierde la esperanza de cumplir sus sueños, “Me gustaría retomar mis estudios, porque ten todos los trabajos te piden cuarto medio; y estudiar para trabajar en el Hospital. Además sueño con tener algún día mi casa y ojalá fuera acá, porque en Alerce sale harto pesado”.

Jeannette Ulloa

Jeannette Ulloa, de 46 años, vive en una toma, en los faldeos del cerro de la Población Antonio Varas Norte. Para ella y su grupo familiar este años quedará en su memoria, por las dificultades que ocasionó el desempleo de su esposo Roberto Tecas, quien dejó de existir hace unos días, a los 58 años, tras luchar como dirigente del Comité de Cesantes de la Construcción Unión y Esfuerzo.
“Cuando yo era más joven y no tenía nada para darle a mis hijos que eran chiquitos –Germán, Brayan y Francisco-, mandé una carta a la Iglesia Evangélica Bautista, pidiendo a una hermana si por favor me podía ayudar con unos víveres y esa carta llegó a las manos de Roberto Tecas. Él se movilizó inmediatamente porque era muy solidario”, cuenta.

“El era un hombre muy luchador, que le gustaba ayudar a los niños y las mujeres que no tenían trabajo. Era un hombre excelente, un lindo esposo, un buen padre”, cuenta que ambos parecen dichosos esperando el nacimiento de su hija Génesis, hoy de 9 años.

Este año se iban a cumplir 14 años desde que se conocieron, tiempo en el cual no sólo se preocupó de sacar adelante a su mujer y a su hijita adorada, sino que también crió como propios a los hijos de Jeannette. “El estaba cesante como diez meses, pero siempre luchó para que en su hogar no faltara el alimento, la leña y el gas, así como luchó por sus trabajadores, consiguiéndose cajas de alimentos en la Gobernación. A él igual le daban una cajita y su paquete de leche para su niñita”, relata.

También se le veía en la plaza de Puerto Montt con sus compañeros cesantes, pidiendo monedas. “Aunque le daba vergüenza, ponía su gorrito, porque la pobreza de nosotros era terrible. La gente respondía y con eso teníamos un poco de leña, gas y pan”, señala.

Aún conmovida por su partida, Jeannette cuenta que su Roberto “se fue sonriendo, yo creo que conforme con todo lo que hizo. Aunque es muy triste que se haya ido cesante, después de luchar tanto para conseguir un trabajo y poder mantener a su familia”.

Por el agua debe seguir cancelando $6 mil a una vecina. Justamente, su único ingreso fijo son los $6 mil 500 de asignación familiar por su hija. “No quiero que a ninguna mujer de los trabajadores le pase lo que estoy pasando, porque es muy doloroso quedar sin marido, sin trabajo, sin dinero, sin hogar, sin nada”, afirma.

Pese a las dificultades que enfrenta, no pierde la esperanza de “tener una casa bonita, como él quería dejarle a su hija Génesis. No quiero que ella siga viviendo en las tomas, en las faldas de un cerro, con los ratones y malos olores; saliendo por un callejón lleno de perros que la pueden morder y temiendo que el cerro caiga encima de mi casita”, dice.

En medio de tanta tristeza, se abrió una puerta para Jeannette, porque el 1 de Agosto comenzará a trabajar en áreas verdes. “Estoy contenta porque voy a poder salir adelante y hacer feliz a mi hija”, valora entusiasmada.

Y como ella tendrá la oportunidad de trabajar, no se olvida de los demás y le pide al Presidente Piñera que “por favor le dé trabajo a las familias que tienen niños que están sufriendo de hambre.”

Esa dramática realidad la conoce muy bien Fabiola Paredes, de 32 años, a quien le cambió la vida luego de perder, ella y su esposo, sus trabajos en el sector salmonero. “Fue muy terrible, porque quedé con un préstamo en una caja de compensación y con deudas en casas comerciales que me tiene en Dicom, lo que hace más difícil encontrar trabajo” explica mientras trabajo con el azadón –pese a sus cinco meses de embarazo –, limpiando áreas verdes en el sector de Mirasol, en una mañana muy helada y con fuerte viento.

Ella y otras compañeras desvinculadas del salmón son parte de un programa de pro empleo, donde le pagan $67 mil por media jornada. “Con esto apenas alcanza para pagar la luz y algunos alimentos, pero no para sustentar a una familia. Pero eso las autoridades nunca lo van a entender, porque ganan mucha plata y tendrían que estar en el pellejo de uno, para que vean que realmente no se puede vivir con $67 mil”, dice.

A su juicio no puede decir que es extremadamente pobre, “porque hay gente más pobre que yo. Le doy gracias a Dios que tengo comida y un techo”, destaca.

Marina Alvarado

Es quien organizó a las trabajadoras del salmón para buscar apoyo. Siempre destacó como dirigente sindical de Marine Harvest en Chinquihue y hoy preside un sindicato multisectorial que agrupa a 1.200 trabajadores.

“Yo veo a muchas de estas madres que no tiene cómo mantener a sus hijos en vacaciones; no tienen qué comer y están a puro tecito”, lamenta.

Si bien valora el apoyo que han recibido de la Gobernación de Llanmquihue, y especialmente del gobernador Francisco Muñoz, lamenta –según dice – la falta de preocupación del intendente Sebastián Montes y del alcalde Rabindranath Quinteros.

“Los $67 mil no alcanzan, porque si el azúcar antes se compraba en kilos, hoy se está comprando en gramos”, asegura Marina.

Sin embargo, la cesantía originada por la crisis salmonera en la Región no sólo ha llevado a la pobreza a las operarias, sino que también a altos ejecutivos. Es el caso de Cristián

REFERENCIAS

Moreno Águila, M. (2010, 25 de Julio) El drama que viven 117 mil personas en la Región, Cuando la pobreza toca la puerta. El Llanquihue. p. 30-33

Para una comprensión mínima

Con el objeto de una comprensión efectiva de la información, se dispensa un glosario de términos al final del artículo, con su correspondiente fuente de información.

MIDEPLAN o Ministerio de Planificación: es el responsable de evaluar la situación socioeconómica y el impacto de los programas sociales en las condiciones de vida de la población y de los hogares, contribuyendo así a mejorar la eficacia y la eficiencia de la política social. http://www.mideplan.cl/casen/

Encuesta CASEN o Caracterización Socioeconómica Nacional: se constituye como el principal instrumento de medición socioeconómica para el diseño y evaluación de la política social existente en Chile. http://www.mideplan.cl/casen/
Es una encuesta de hogares representativa a nivel nacional, regional, urbano y rural y comunal. Ésta se ha aplicado desde el año 1985 con una periodicidad bianual y trianual. Su aplicación se ha realizado en los años 1987, 1990, 1992, 1994,1996, 1998, 2000, 2003, 2006 y 2009. http://www.gobiernodechile.cl/especiales/que-es-la-encuesta-casen/

Canasta de satisfacción de necesidades básicas: Método empleado para determinar la línea de la pobreza y la línea de la indigencia en la población.
El método de la canasta parte de la determinación del costo de una canasta alimentaria que permita satisfacer las necesidades nutricionales de las personas. Una segunda canasta está constituida por el valor de todos los bienes consumidos conjuntamente con los alimentarios para dicho nivel de consumo de calorías. Es la canasta total. Si el ingreso per cápita percibido por un hogar es inferior a la canasta alimentaria, se habla de indigencia. Si el ingreso es inferior a la canasta total, se trata de un hogar en situación de pobreza. http://cdi.mecon.gov.ar/biblio/docelec/cep/TE13.pdf

Pobreza e indigencia: Una persona se considera pobre si su nivel de ingreso está debajo de un nivel mínimo que le permita satisfacer sus necesidades básicas, e indigente cuando no le permite satisfacer sus necesidades alimentarias. http://www.gobiernodechile.cl/especiales/que-es-la-encuesta-casen/

Dicom: es una empresa privada que mantiene un registro de información, de acceso público, acerca de la actividad de las personas en el sistema financiero y comercial. Por ello, cualquier consulta sobre información que se mantenga en dicho registro debe consultarse directamente con ellos.
Resulta claro que es útil para empresas financieras que quieren minimizar los riesgos de préstamos y créditos para deudores habituales o morosos y evitar estafas. Hasta ahí todo es claro y lógico, pero ésta herramienta se usa también para juzgar a quién se le da trabajo, con implicancias muy graves. http://www.suite101.net/content/el-dicom-a21251

Programa pro empleo: Programa del gobierno para facilitar la inserción laboral de trabajadores cesantes en un puesto de trabajo dependiente. http://proempleo.sence.cl/

Asignación Familiar: Un subsidio estatal que consiste en una suma de dinero por cada carga familiar que un trabajador dependiente, pensionado o algunos trabajadores independientes, acredite. Es otorgada por el empleador a los trabajadores a través del Instituto de Previsión Social (IPS) o una caja de compensación, según corresponda http://www.bcn.cl/guias/asignacion-familiar 15 de octubre 2010-10-15

*Carga: Esposo o esposa discapacitada, y los hijos biológicos o adoptados hasta los 18 años, o hasta los 24 años si siguen solteros y están estudiando. También pueden ser carga los nietos y biznietos y hasta la madre viuda, y padres o madres mayores de 65 años. (Sin fuente)

Ficha de Protección Social: Es el instrumento que reemplaza a la Ficha CAS y es la puerta de ingreso de las personas a prestaciones y/o beneficios sociales del Estado. La Ficha de Protección Social (FPS) permite identificar mejor las necesidades de los hogares chilenos para garantizar un acceso más justo al Sistema de Protección Social. El cambio apunta a seleccionar con mayor pertinencia y precisión a los potenciales beneficiarios de Programas Sociales y beneficios del Estado, no sólo en virtud de su condición socioeconómica en general, sino también en función de necesidades diferenciadas y de situaciones específicas, como discapacidad, vejez, desempleo, bajos ingresos, enfermedades, entre otras vulnerabilidades. http://www.fichaproteccionsocial.cl/faqs/faqs.php#anchor_FAQ_2

domingo, 12 de diciembre de 2010

Generación X

Vertiente juvenil eminentemente norteamericana, surgida a inicios de los años noventa bajo el signo del desencanto, el escepticismo y la impotencia social. Este arquetipo fue retratado por el novelista Douglas Coupland (Generación X,1992). Se trata de muchachos y muchachos y muchachas que se niegan a ser rotulados o situados en categorías. En su mayoría son hijos de padres divorciados, y en consecuencia, como víctimas de claras carencias afectivas familiares, priorizan el vínculo interpersonal y son capaces de hacer lo que sea para ser amados. La intimidad sexual está por consiguiente implícita en sus relaciones; ponen mucho énfasis en su individualidad, no tienen prejuicios raciales y desconfían por completo de las instituciones tradicionales. No les importa trabajar para “ganarse el pan”, y ostentan un claro escepticismo hacia el futuro, lo cual a menudo los hace sufrir agudamente y los irrita sobremanera. Creen que no deben sujetarse a ningún limite y con frecuencia se asumen como buscadores espirituales, pero sulen conformarse con la rutinas sobrenaturales. En lo que no tienen dudas es en el acto de adherir incondicionalmente a las nuevas tecnologías electrónicas: son altos consumidores de imaginería virtual, de música experimental y de fantasías exóticas.

Actualmente hay exponentes de la generación X en todos los países del mundo occidental capitalista, en el marco del proceso globalizador imperante.

Tello, Neiro y Kreimer, Carlos (2005) Diccionario de Movimientos del siglo XX. Buenos Aires: Longseller.