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Bienvenidos a mi blog, este es un espacio dedicado a publicar textos fundamentalmente epistemológicos, tratando ser una aproximación amable sobre un tema complejo en el que abundan las retoricas absurdamente crípitcas y barrocas para el entendimiento común de la población general.

domingo, 27 de diciembre de 2009

Reducciones territoriales

La idea de reservación o reducción no es de origen nacional. (…) el avance hacia el Oeste, “la conquista del Oeste”, en Estados Unidos, y en torno a ello se discutía largamente lo que debería y podría hacerse con los indígenas. Lo mismo estaba ocurriendo esos días en Australia, Canadá, Nueva Zelanda, y de un modo diferente pero consimilitudes ideológicas en muchas partes de África y en especial en Argelia, por parte de los franceses. Se trataba de un periodo de expansión de las fronteras del capitalismo europeo de carácter explosivo.

Todos estos procesos partieron del concepto colonialista de Terra Nullis; esto es, de que no existía propiedad previa de la tierra por parte de los indígenas y que el Estado era propietario y debía repartir los territorios. Se pretendía por tanto realizar una colonización planificada y ordenada, y no como había sido hasta entonces, un proceso en que los aventureros se enfrentaban con los indígenas, y debemos decir que las posiciones más humanitarios, de aquel entonces se inclinaron por entregarles “tierras adecuadas a sus costumbres”, las que se denominaron “reservaciones de tierras”. El nombre procedía ya que esas tierras eran reservadas para los indígenas y el resto de las tierras eran entregadas a la colonización europea que presionaba en ese periodo masivamente. La reservación fue entendida como un sistema de protección. Se suponía que a partir de esa situación protegida se iría produciendo un creciente y paulatino proceso de integración/ asimilación de los indígenas hasta su desaparición no física pero si cultural como población, diferenciada. En estados unidos la ideología conocida como el Manifieste Destiny presidió esta campaña, que con ribetes místicos-religiosos pretendía “llevar la civilización” hasta las tierras dominadas por la barbarie. Estas teorías y prácticas fueron conocidas por los líderes chilenos que llevaron a cabo el proceso del que estamos hablando. Se consideraba esta forma de actuar como la más moderna de aquella época y estaba avalada por la experiencia internacional.

Bengoa, José. (2007). Historia de un conflicto. Santiago: Planeta

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