Es un movimiento internacional contemporáneo extensible a
todas las artes. El filósofo francés Gilles Lipovetsky (La era del vacío, 1938)
reflexiona sobre este movimiento desde la moda y sostiene que desde los
sesenta, ésta es cada vez menos distitivo de clase y tiende aser más abierta,
tiende hacia lo efímero, la seducción y la diversificación del gusto. Según este
pensador, el predominio de lo individual por sobre lo universal, la marcada
carencia de proyeco histórico y el consumismo general conducen al surgimiento de
un individualismo narcicista: «[este individualismo] corresponde a la
descrispación de las posturas políticas e ideológicas y a la sobrevaloración
concomitante de las cuestiones subjetivas. Wiindursf, skate, ala delata, la
sociedad posmoderna es la era del deslizamiento». La creciente autonomía del
individuo y la aparición de una nueva solidaridad entre pequeños grupos
acompañan una ético no fundada en esencialismos ni en el deber, isno
minimalista y pragmática, que huye de los fundamentos transmundanos y metafísicos.
Otro francés, Jean Francois Lyotard (La condición
posmoderna, 1979), considera el fenómeno posmoderno desde los medios de
información, y entiende que su expansión y consiguiente facilidad de acceso a
una inabarcable cantidad de material de origen aparentemente anónimo es parte
de esta cultura y contribuye a la disolución de los valores de identidad y de
la responsabilidad personal.
El posmodernismo es antes un movimiento de las artes, la
arquitectura y la moda que un movimiento filosófico. La filosofía viene a
reflexionar “sobre” estos movimientos
Tello, Neiro y Kreimer, Carlos (2005) Diccionario de
Movimientos del siglo XX. Buenos Aires: Longseller.