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Bienvenidos a mi blog, este es un espacio dedicado a publicar textos fundamentalmente epistemológicos, tratando ser una aproximación amable sobre un tema complejo en el que abundan las retoricas absurdamente crípitcas y barrocas para el entendimiento común de la población general.

lunes, 3 de enero de 2011

La lógica de la clasificación

Clasificar es reunir los diversos objetos del pensamiento, según sus semejanzas y diferencias, en un sistema de grupos o clases, coordinados y subordinados entre sí.

Es la reducción de la pluralidad a la unidad. Se parte de una pluralidad de individuos o especies, y, por una serie de actos sucesivos de eliminación de diferencias, se llega a la unidad, representada en un concepto, género superior.

Nuestra mente postula que todos los objetos son reducibles a un número limitado de entidades o elementos típicos. Cada uno de los cuales se repite esencialmente, idéntico a sí mismo, a través del tiempo y del espacio. Cada individuo tiene una existencia y modalidades propias, inconfundibles con sus demás congéneres, y sin embargo cada uno de esos seres es la repetición de ciertas propiedades y relaciones que permanecen idénticas y que son precisamente las que permiten representarlos en un concepto común y designarlos con un mismo nombre. Cada cosa concreta y cada hecho individual es un ejemplar o espécimen de un tipo ideal susceptible de ser determinado.

1. MECANISMO DE LA CLSIFICACIÓN

El punto de partida es una pluralidad dada de objetos, y el problema consiste en reunir esos objetos, según su semejanza, en grupos que formen un sistema jerárquico y completamente unificados entre sí.

Se comenzará por unir los individuos en grupos de primer grado; en seguida, esos grupos se compararán entre sí y se analizarán para reunirlos, siempre según sus semejanzas, en grupos de segundo grado; del mismo modo se procede después con éstos, y así sucesivamente hasta llegar a un grupo único, clase superior a todas las anteriormente consideradas o constituidas, y que las abarca a todas.

2. DIFERENTES CLASES DE CLASIFICACIÓN

a. Naturaleza de los objetos
i. Reales: Cosas o hechos singulares que existen como unidades en el mundo de la experiencia.
ii.Ideales o de conceptos.
b. Fin
i.Científicas o teóricas: Establecer en los objetos un orden que facilite su estudio, que permita incrementar el conocimiento de sus caracteres reales y de sus leyes.
ii. Prácticas: Facilitar la acción humana en cuanto ésta tiende a realizar un valor distinto del conocimiento puro.
c. Grado de perfección
i. Naturales: Reproducir fielmente el orden mismo de la naturaleza
ii. Artificiales: Los caracteres que considera para construir los grupos no son importantes o son secundarios.

3. PRINCIPIOS DE LA CLASIFICACIÓN NATURAL

a. Principio de las correlaciones orgánicas: ciertos caracteres están ligados de tal modo que la presencia, ausencia o variación de unos influyen en otras. Si uno de ellos está dado, todos los otros también lo están y ninguno de ellos puede ser dado sino con todos los demás.
b. Principio de la subordinación: Existen caracteres dominantes y caracteres subordinados.

Referencias:

Bustos, Oscar Ahumada (1954) Cuaderno de lógica. Santiago: Departamento de Publicaciones, Universidad de Chile.

6 comentarios:

  1. Hola, ya sé que esta entrada en tu blog, es un poco antigua, pero la vi hace tiempo, y no pude en ese momento comentar esta entrada que, desde luego me parece muy interesante, aunque tenga algunas objeciones, las cuales me dispondré a expresar sin más dilación.
    En realidad la necesidad de llevar a cabo una clasificación lógica de la realidad es imposible tal y como ya expresa, a través de su entramado de máximas lógicas-matemáticas, Wittgenstein en su "Tractatus". Según este, un objeto "A" no puede ser idéntico a otro objeto "B", porque si tal objeto "B" fuera prácticamente idéntico a "A" estos dos objetos recibirían el mismo nombre, y no sería posible diferenciarlos. Si esto ocurriera, es decir, que existieran dos objetos que compartieran todas sus similitudes entre sí, estaríamos ante dos realidades idénticas e identificadas con el mismo término, tendríamos dos "A". Según la clasificación lógica que bien expone esta entrada, existen numerosos objetos así, ya que utilizamos términos semejantes para realidades aparentemente semejantes, aunque realmente tales realidades, no son idénticas, por el contrario, presentan numerosas diferencias. Utilicemos un termino harto cotidiano como es el de "flor". Usamos indiscriminadamente este término para referirnos a diferentes flores, cuando ninguna de ellas son idénticas entre sí. Sin duda se podrá alegar, que "flor" es un heterónimo y que subordinados a él se encuentran numerosos hipónimos, y que las realidades a las que se aplican estos hipónimos si se corresponden lógicamente entre sí. Pero ni aun así esto sería verdadero, pues, y esta es mi conclusión, no existe ninguna realidad idéntica a otra. Por tanto, si como hemos visto una clasificación lógica de la realidad es imposible, ¿Cuál es la causa de que exista realmente tal clasificación? y más aún ¿es necesaria dicha clasificación? Pues bien a la primera pregunta podríamos responder que la necesidad de vivir en sociedad del ser humano, obliga al la colectividad de individuos de una sociedad a establecer unos ciertos términos a los que referir la realidad en su conjunto. Por tanto, no una causa lógica sino de necesidad, es la madre de la clasificación, que por todo lo dicho anteriormente, prescindiré de "calificar" de lógica.
    Con respecto a la segunda pregunta, como vemos la clasificación surge de la necesidad de comunicación entre individuos de una sociedad, por tanto, si la vida en sociedad no nos interesa, la clasificación es innecesaria, por el contrario, como la gran mayoría vivimos en sociedad, y no somos "ni animales ni dioses" como decía Aristóteles, la clasificación, es necesaria, al igual que el lenguaje en general. La clasificación es necesaria en tanto que se vive en sociedad.
    Por último me gustaría aludir a una reflexión de Jean-Paul Sartre en "La náusea", en la que Sartre, observando la raíz de un árbol, llega a la conclusión de que ésta no tiene nada en común con la raíz que él tiene en la cabeza.
    Bueno, me despido, felicitando y agradeciendo la existencia de éste blog que aporta cierta información de gran interés. También quisiera disculparme si me he tomado mucha libertad en participar en este blog sin ningún tipo de invitación ni nada de eso. Sin más me despido.

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  2. Hola Fausto Osorio son las 07:00 am y acabo de ver tu comentario, y si bien no tengo mucho tiempo para dar una respuesta mejor, si puedo acusar que leí tu post. Primeramente me halaga ser leído con atención por otro estudiante, agradezco también la contribución y las felicitaciones de tu parte.
    Citar a Wittgenstein es un referente obligado para este tipo de temas, en hora buena que lo hayas leído, yo lamentablemente aún no he tenido el gusto, pero está en lista de espera.
    Más tarde leeré tu aporte con atención.

    Saludos y gracias por visitarme.

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  3. Hola Bakunin

    Me alegro que hayas visto esta humilde aportación, esperaré ansioso una respuesta, tras una lectura más atenta

    Saludos.

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  4. A Fausto:

    Leí tu aporte, me parece muy ilustrativo, más si consideramos que no he leído a Wittgenstein, sin embargo desde mis lecturas puedo ratificar ciertos puntos.
    Lo primero, es señalar que efectivamente el propósito de la clasificación es buscar lo común en lo diverso, poder reducir la diversidad infinita del mundo. No obstante es preciso hacer una revisión a los conceptos que expone Carlos Pérez Soto (Profesor de Estado en Física, chileno) en su crítica al razonamiento popperiano, Donde alude a los términos de “General”, “particular” y “singular”. Me interesa este último, el “singular” que refiere a lo que es “precisamente ahora” y “esto”, los singulares son “ahora” todos distintos e infinitos, por tal motivo en el lenguaje el singular absoluto no tiene nombre, pues la palabra “una mesa” condensa infinitos singulares absolutos en un “particular”, esto implica que el lenguaje no se refiere a lo que existe como existe, pues no hay infinitas palabras para cada singular.
    El “eso construido”, por ejemplo, “esa mesa” es lo particular. En la lógica de Russell el “ser una mesa” está relacionado con el cuantificador existencial que la establece formalmente como un particular, aunque sea, considerada de manera empírica, una colección infinita de singulares absolutos.
    En segundo lugar es preciso reparar también en que según Gregori Bateson la clasificación es uno de los ejercicios intelectuales más básicos del hombre, siempre tendemos a clasificar y ordenar el mundo.

    Saludos cordiales.

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  5. A Bakunin:

    Realmente tienes razón en el afirmar que todo ser humano tiende a clasificar. Pero eso ocurre precisamente por la necesidad de una vida social. Imaginemos una individuo que viviera en una ciudad cualquiera. Si ese individuo no pudiera referirse a las realidades particulares utilizando términos, le sería imposible sobrevivir en esa sociedad, a menos que pudiera sobrevivir completamente solo.
    En cuanto a la funcionalidad del lenguaje, no como representante de una realidad como es, si no como una metáfora (por utilizar la terminología nietzscheana) me gustaría referir que de ese modo, el lenguaje es un artificio, es como crear una realidad paralela a la realidad en sí. Por ultimo, ese artificio, no es un ejercicio lógico, sino arbitrario, motivado por la necesidad de vivir en sociedad del individuo.

    Saludos.

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